La gastroenteritis es un conjunto de trastornos
producidos por la inflamación de la mucosa gás-
trica e intestinal y cuyo síntoma principal es la dia-
rrea. La diarrea se considera aguda cuando no
supera las dos semanas de duración, persistente
cuando dura entre dos y cuatro semanas y cróni-
ca si dura más de cuatro semanas.
Es una entidad muy frecuente pudiendo afirmar
que casi el 100% de la población tendrá alguna
forma de gastroenteritis a lo largo de su vida.
Causas
La gastroenteritis aguda (GEA) se puede originar
por varios motivos, aunque más del 90% tienen
una causa infecciosa (bacteriana o vírica).
•
La GEA puede ser provocada por bacterias
que se encuentran en el agua o en los alimen-
tos contaminados. La infección se transmite
de una persona a otra o por un animal, nor-
malmente por vía oral (llevarse las manos a la
boca después de haber entrado en contacto
con un posible foco infeccioso).
•
Los virus pueden provocar también diarreas
secretoras. De hecho, en las zonas de clima
templado, durante el invierno, los virus son los
principales responsables de la proliferación de
diarreas, lo suficientemente graves en algunas
ocasiones como para que los niños meno-
res de 4 años y ancianos fundamentalmente,
tengan que ser hospitalizados por deshidrata-
ción. Este hecho puede aparecer en cualquier
tipo de GEA.
Otras causas menos frecuentes:
•
Por parásitos que normalmente se adquieren
al beber agua contaminada.
•
Las diarreas agudas que no son provocadas
por causas infecciosas suelen ser debidas a la
ingestión de sustancias tóxicas, intolerancia a
la lactosa, ingesta de metales pesados o por
los efectos secundarios de algunos fármacos
(antibióticos).
Síntomas
La diarrea o se presenta desde el principio o apa-
rece generalmente tras unas horas de vómitos
cuando estos se van calmando y en muchos ca-
sos coinciden ambos. Ha de ser acuosa o pasto-
sa, amarillenta o marrón clara, pero no debe tener
ni sangre, ni coágulos, ni pus, ni moco intenso. Si
lo tienen, consulta con tu médico urgentemente,
especialmente si hay fiebre de más de 38º C y/o
si hay antecedentes de viajes a países tropicales.
El dolor cólico es normal siempre que no sea ex-
cesivamente intenso ni duradero y el abdomen no
se ponga duro (en tabla). Si las heces son negras
como el petróleo (melenas) hay que ir al hospital
urgentemente pues indica sangrado del estó-
mago que puede ser muy grave. Otros síntomas
que pueden aparecer son dolores musculares y
articulares, generalmente asociadas a viriasis con
afectación general, somnolencia, estupefacción y
cansancio cuando aparecen signos de deshidra-
tación.
Tratamiento
En principio siempre es conveniente consultar
con el médico quien hará el diagnóstico preciso
sobre el tipo de gastroenteritis que nos afecta, y
dependiendo de ello será el responsable del tra-
tamiento específico (antibióticos, etc.).
¿Qué medidas generales podemos aplicar?
•
La primera sería una adecuada dieta. Siempre
es recomendable, si se puede, no ingerir ali-
mentos sólidos durante las 24 primeras horas.
Todo lo contrario que con los líquidos cuya in-
gesta abundante (agua, bebidas isotónicas…)
es imprescindible para evitar la deshidratación.
Pasado este plazo hay que comenzar con una
dieta blanda, caldos vegetales, pescado, arroz,
jamón york, etc. para continuar introduciendo
posteriormente el resto de los alimentos poco
a poco desde los más digeribles (pescados y
carnes a la plancha, tortillas, etc.) hasta los más
indigestos (legumbres, embutidos, grasas, etc.)
siendo los lácteos los últimos en incorporarse
cuando el paciente esté asintomático y siempre
dependiendo de la evolución clínica.
•
No debemos automedicarnos con medica-
mentos tipo loperamida (Fortasec) sin consul-
tar con nuestro médico. Tenemos que tener en
cuenta que estos medicamentos están con-
traindicados en las gastroenteritis bacterianas
pues inhiben los movimientos peristálticos del
intestino y la evacuación de las heces infec-
tadas. Hay que tener en cuenta que en estos
casos la diarrea ayuda a evacuar los jugos
gástricos infectados evitando que se acumu-
len en el intestino y perpetúen la infección o
puedan surgir complicaciones (generalización
de la infección).
•
La dieta es importante: Aparte de ir incorpo-
rando los alimentos de forma progresiva es
conveniente evitar los lácteos en varios días
pues la irritación de la mucosa intestinal pro-
voca una intolerancia temporal a la lactosa.
Esto es especialmente aplicable a la leche y en
menor medida a los yogures y quesos poco
elaborados pues éstos en su proceso de fer-
mentación contiene un 30%menos de lactosa
en el caso de los yogures. En el caso de los
quesos cuanto más curados son menor con-
tenido en lactosa.
Por:
Doctor Román Rodríguez Barrigüete
Servicios Médicos Madrid