Raúl Parreño es encargado y lleva
más de 20 años en FCC. David Or-
tega es jefe de obra y se incorporó a
FCC en septiembre de 2005. Ahora
prestan sus servicios en el contrato
de servicios de explotación y mante-
nimiento de las redes de saneamien-
to periférico gestionadas por el Canal
de Isabel II.
Héroes de FCC
Nuestros compañeros Raúl y David, aún
siendo un día festivo no lo dudaron y fueron
al lugar del suceso, dando órdenes a los
operarios de no bajar al pozo bajo ningún
concepto, y avisar a la Guardia Civil.
Cuando llegaron, la Guardia Civil ya se en-
contraba en el lugar del suceso, y ante el
miedo de que el perro pudiera atacar deci-
dieron ir en busca de ayuda.
Raúl y David esperan la ayuda, pero en vis-
ta de que tarda mucho, deciden ponerse
manos a la obra y ayudar al perro. Después
de estar un buen rato hablando al animal
para tranquilizarlo, acuerdan intentar res-
catarlo. Para ello, prepararon un lazo con
una eslinga que lanzan desde la parte su-
perior del pozo para que el perro pudiera
pasar sus patas delanteras a través de la
cincha y poder subirlo, pero el perro no te-
nía fuerzas. Entonces deciden que alguien
tiene que bajar a media altura del pozo para
ayudar al animal a colocarse la eslinga. No
sabían quién tenía más miedo si el perro o
ellos. El galgo no puso ningún impedimento
y se dejo ayudar sin ningún contratiempo,
le pasaron la eslinga por las patas y lo su-
bieron a la superficie. Al rato de rescatarlo
apareció la Guardia Civil con la protectora
Narub que se hizo cargo del perro.
Pasado un tiempo Raúl y David deciden
hacer una visita a la residencia canina para
preocuparse por el estado de la galga y
ver si había sobrevivido, ya que durante
los días que permaneció en el pozo había
comido carne putrefacta y bebido aguas
fecales. Para asombro de todos la perrita
estaba bastante recuperada y con un nue-
vo nombre, Mila (Milagro por seguir viva);
les reconoce y se abalanza sobre ellos
“colmándonos de agradecidos besos” -co-
mentan.
Según les ha informado la protectora que
se hizo cargo de Mila, parece ser que a
través de una asociación y tras pasar los
reconocimiento veterinarios precisos, una
familia se ha enamorado de ella y la ha
adoptado “nuestra galga Milagros, ha sido
adoptada por una familia con hijos, no nos
pueden confirmar si ha sido en Bélgica o
Austria finalmente, pero sí que el animal
estaba francamente bien cuando fue adop-
tado”.
e r s o n a s