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En todo el mundo, no hay ningún otro lugar
como Londres. Diferentes muchos, pero
igual a la capital de Inglaterra y de Gran
Bretaña, y la mayor ciudad de la UE, nin-
guno. Londres es una metrópoli animada y
multicultural las 24 horas del día. Estimu-
lantes mezclas de lo antiguo y lo moderno.
La animación de la ciudad y la tranquilidad
de las numerosas zonas verdes hacen que
Londres sea un lugar único tanto para los
turistas como para sus habitantes. Aquí se
hablan más de 300 idiomas, lo que contri-
buye a la fascinante riqueza cultural de la
ciudad y a su vez la convierte en un sitio
fantástico al que viajar para vivir culturas de
todo el mundo.
Una voluntaria
en la ceremonia de apertura
En los primeros meses de 2012 había una
visión de ‘Armagedon Olimpiadas’. Los
medios de comunicación hablaban del co-
lapso de nuestro metro victoriano y raquí-
tico, de caos en las colas de inmigración
de Heathrow. La cita olímpica se veía como
una barbaridad en tiempos de austeridad
con el agravante de que miles de británi-
cos se habían quedado sin entradas para el
mayor evento deportivo planetario.
Sólo hubo que esperar a las 19:30 horas
del 27 de julio para acallar las críticas. Las
dos horas de duración de la ceremonia
de apertura de Danny Boyle hicieron que
Londres pasara de “zero a hero”. El cinis-
mo se convirtió en orgullo; las críticas, en
optimismo y, automáticamente, se desató
una ola de pasión y orgullo nacional ante
la imagen de país moderno y vibrante que
Boyle puso en escena. La “Reina” saltando
desde un helicóptero en una escena pro-
pia de James Bond y Mr. Bean tocando el
piano son algunas de las imágenes que ya
han quedado para siempre en el subcons-
ciente colectivo en un testimonio de humor
británico.
Voley playa en el recinto olímpico de Horse Guards Parade
Por María Ramos
Colaboradora externa de FCC