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Bienestar
Medicamentos
y Seguridad Vial
Conducir es una tarea compleja en la que
es imprescindible controlar la actividad
psicomotora, la cognitiva y conductual,
acompañadas de las percepciones visua-
les y auditivas y, además, una previsión o
anticipación ante las circunstancias que se
presentan y poder ser solventadas con ga-
rantía de éxito y evitar así el accidente.
Si además de estas difcultades en el com-
plicado mundo de la conducción, le aña-
dimos otros ingredientes, como son el
consumo de fármacos, las probabilidades
de sufrir accidentes aumentan considera-
blemente. Los fármacos, asociados a la
conducción, pueden ser un factor de riesgo
importante.
Los medicamentos
Los efectos negativos de los medicamen-
tos sobre la capacidad de conducción se
denominan efectos indeseables, pero no
siempre son igual de intensos en unas per-
sonas que en otras.
Los principales efectos secundarios de los
medicamentos que pueden afectar negati-
vamente en la capacidad de conducir son:
Efecto sedante: somnolencia, disminu-
ción de la alerta, aumento del tiempo de
reacción, etc.
Alteraciones oculares: visión borrosa,
trastornos de acomodación.
Alteraciones auditivas: zumbidos, hi-
poacusia transitoria, acúfenos.
Efecto anticolinérgico: vértigos, insom-
nio, cefaleas, etc.
Reacciones neuropsiquiátricas: nervio-
sismo, confusión, depresión, alteracio-
nes del comportamiento, etc.
Alteraciones circulatorias: arritmias, hi-
potensión, parada cardíaca.
Hipoglucemia.
Manifestaciones de coordinación psi-
comotora: convulsiones, agitación, es-
pasmos musculares, etc.
Siempre que nos prescriba el médico al-
gún medicamento es conveniente indicarle
nuestros hábitos como conductor y leer
detenidamente el prospecto. En el caso de
que nos pongan un tratamiento, es muy
importante averiguar si puede tener algún
efecto sobre nuestra capacidad de con-
ducción.