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Bienestar

capa que los momentos conflictivos, laborales, familiares o de cualquier otro tipo que nos someten a un estrés excepcional no son el momento más adecuado para dejar de fumar. Si lle-vamos años podemos perfectamente esperar unas semanas o meses.

3 Establecer una fecha definida para dejar de fumar, preferiblemente antes de dos semanas, pero no más de un mes desde que tomamos la decisión.

4 Hacer una lista de todas las personas importantes (amigos, familiares, com-pañeros de trabajo, vecinos) a los que se informará de la decisión de dejar de fumar y a los que pedirá ayuda en la tarea, la más importante que no fu-men delante de usted.

5 Revisar los intentos anteriores que haya hecho el paciente para abando-nar el tabaco y aclarar cuales fueros los factores beneficiosos y perjudicia-les en esas ocasiones. Reflexionar, y si es con un profesional mejor, sobre las dificultades con las que se enfrentará: síntomas de abstinencia, tentaciones o situaciones que le inducirán a fumar y posibles acontecimientos causantes de estrés que aumenten el deseo de tabaco.

6 Hecha la anterior reflexión el siguiente paso parece obvio: Evite aquellas cir-cunstancias que le inducen a fumar. Si relaciona cigarrillo con café o copas, evite ambos durante un periodo de tiempo que será variable dependien-do de las personas, pero que en caso de tratamiento, durará lo que éste. No olvidar que un fallo simple, como dar

una calada al cigarrillo de otra per-sona, puede provocar una recaída completa del tabaquismo.

7 Eliminar todos los productos para fumar presentes en el medio am-biente, antes de la fecha elegida para dejar el tabaco. Si el conyugue o una persona significativa sigue fu-mando, el paciente debe considerar estrategias para resistirse a la tenta-ción y a las ocasiones de fumar. En estos casos lo ideal es que ambos acuerden ponerse en tratamiento o lo dejen al mismo tiempo.

Por último reseñar que el grupo de pro-fesionales que formamos los Servicios Médicos de FCC tenemos ya una larga experiencia en el tratamiento del taba-quismo tanto en su vertiente orientativa y psicológica como en la farmacológi-ca. Aprovecho la ocasión para ofrecer este servicio a todos los trabajadores de la empresa, que aún siguiendo las orientaciones anteriormente propues-tas, no sean capaces de dejar esta adicción y sean conscientes del daño irreparable que a medio-largo plazo puede ocasionarles.

En FCC tenemos una larga experiencia en el trata-miento del tabaquismo tanto en su vertiente orientativa y psicológica como en la farmacológica.